L@M/ «Los que no quieren acabar con los cultivos de coca, marihuana y amapola en Colombia son el Estado Colombiano y el Gobierno Norteamericano, que se han negado a escuchar a los campesinos y a discutir la propuesta de sustitución gradual que les fue presentada hace mas de un año, sosteniéndose en mantener una política anti-droga que en treinta años solo ha conseguido fracasos», denuncian organizaciones indígenas, campesinas y de afrocolombianos en un comunicado dirigido a la opinión pública nacional e internacional.
«El estado colombiano, a través de sus fuerzas militares y de la policía, viene masacrando a humildes pobladores rurales por oponerse pacíficamente a la erradicación forzada manual de los cultivos de hoja de coca. «
«Mientras no exista el dialogo para llegar a una salida concertada, seguiremos oponiéndonos a las fumigaciones y a los operativos de erradicación forzada manual que viene realizando el Gobierno colombiano con el auspicio del Gobierno Norteamericano», aseguran.
Comunicado completo y fotografía, en Encod