
Las detenciones por tráfico se realizan mayoritariamente sobre personas que delinquen para sobrevivir, no para enriquecerse. La incautación de la imagen (que da para poco más de cuatro porros) supuso la detención de una abuela y su nieto. (4)
L@M/ Del medio millón de incautaciones de drogas practicadas en 2013, solo 23.000 acabaron en detención por tráfico ilícito. Por contra, se practicaron 400.000 denuncias por consumo o tenencia de drogas, la mayoría a consumidores de cannabis. (1)
Estas cifras avalan que la acción policial incide bastante más en la represión contra el consumidor de cannabis que en la pregonada lucha contra el narcotráfico. Cualquier persona con voluntad de comprar cualquier droga ilegal en cualquier ciudad española, desconociéndola, la consigue con facilidad en un plazo breve de tiempo.
Se vende en puertos, en poblados, en parques, en discotecas, en bares, en kioskos, en gimnasios, en tiendas de barrio, en modestas casas particulares, en zonas residenciales de postín, en buques de la Armada española, en la calle, en internet… Menos la policía, que paradójicamente cobra por averiguarlo, cualquiera sabe dónde se vende y quién lo hace. Seguir leyendo