
Las detenciones por tráfico se realizan mayoritariamente sobre personas que delinquen para sobrevivir, no para enriquecerse. La incautación de la imagen (que da para poco más de cuatro porros) supuso la detención de una abuela y su nieto. (4)
L@M/ Del medio millón de incautaciones de drogas practicadas en 2013, solo 23.000 acabaron en detención por tráfico ilícito. Por contra, se practicaron 400.000 denuncias por consumo o tenencia de drogas, la mayoría a consumidores de cannabis. (1)
Estas cifras avalan que la acción policial incide bastante más en la represión contra el consumidor de cannabis que en la pregonada lucha contra el narcotráfico. Cualquier persona con voluntad de comprar cualquier droga ilegal en cualquier ciudad española, desconociéndola, la consigue con facilidad en un plazo breve de tiempo.
Se vende en puertos, en poblados, en parques, en discotecas, en bares, en kioskos, en gimnasios, en tiendas de barrio, en modestas casas particulares, en zonas residenciales de postín, en buques de la Armada española, en la calle, en internet… Menos la policía, que paradójicamente cobra por averiguarlo, cualquiera sabe dónde se vende y quién lo hace.
Tras años y años de supuesta lucha contra la droga, lejos de avergonzarse y dimitir, el director General de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó, alardea sospechosamente de estar «en el camino correcto». También saca pecho la Confederación Española de Policía (CEP) que asegura liderar «a nivel mundial el combate contra la droga».
Para orgullo y satisfacción del narcotráfico, España lidera el combate mundial contra la droga y está en el camino correcto, no hay rincón donde falte un camello con una surtida oferta de drogas ilegales debidamente adulteradas.
Aún se ofende la policía si se les relaciona directamente con el tráfico de drogas, como si no hubiera antecedentes. La CEP ha amenazado con querellarse contra Juan Carlos Monedero, el dirigente de Podemos, por vincular a las Fuerzas de Seguridad del Estado con el narcotráfico de los ochenta (2). Lo tiene difícil.
Enrique Rodríguez Galindo (exmilitar condenado por secuestro, torturas y asesinato de Lasa y Zabala) denunció a los diarios Diario 16 y Egin por publicar que el exguardia civil se había lucrado con el narcotráfico y que desvió fondos a la lucha antiterrorista, pero perdió los respectivos juicios en 1999 y 2000. (3)
Enlaces:
(1) Un total de 23.000 personas fueron detenidas en España por delito de tráfico de drogas en 2013
(3) Wikipedia, Enrique Rodríguez Galindo
(4) Desarticulado un punto de venta de droga en Algeciras con la detención de una abuela y su nieto